Relacionada con el 1º de mayo de 2021.
Como bien que el gobierno, por voz del presidente en su discurso del 1º de mayo, asegura que su gobierno representa el verdadero marxismo leninismo y los demás la “izquierda trasnochada”, ha lugar nuestra referencia de hoy. De entrada, la apreciación que no es convincente. Basta ver los efectos de las medidas oficiales para entender que el presidente no habla en serio. Todo el mundo sabe que el marxismo leninismo lucha en defensa de los explotados, muchas medidas gubernamentales benefician a los explotadores, por ejemplo, el ridículo salario mínimo, los inalcanzables precios de la canasta alimentaria o la hiperinflación, la especulación del transporte o los subsidios, el desempleo o las ventajas que el Estado ofrece al gran capital monopolista criollo y extranjero, es decir, los regalos a una burguesía (sobre todo la bancaria) que amasa espectaculares ganancias en plena crisis y pandemia mundial. A propósito de tal aseveración, se nos ocurre recordarle al gobierno lo que entre octubre y diciembre de 1913 decía Lenin en sus Notas críticas sobre la cuestión nacional, referidas a los movimientos de liberación nacional contra a dependencia y el colonialismo. “El principio de la nacionalidad -advertía el gran dirigente bolchevique- es históricamente inevitable en la sociedad burguesa y teniendo presente la existencia de esta sociedad, el marxista reconoce plenamente la legitimidad histórica de los movimientos nacionales. Pero, para que este reconocimiento no se transforme en una apología del nacionalismo, es preciso que se limite rigurosa y exclusivamente a los elementos progresivos de tales movimientos, con el fin de que no contribuya a enturbiar la conciencia del proletariado con la ideología burguesa”. Como vemos se trata de una recomendación leninista que nada tiene que ver con el neoliberalismo de la burguesía venezolana y sus nuevos aliados reformistas, es decir, nada tiene que ver con las privatizaciones, la anarquía, la especulación de precios, la indiferencia oficial sobre tales calamidades capitalistas etc. Todo lo contrario, el verdadero marxismo va en contra de todo eso porque enturbia la conciencia del proletariado obrero-campesino y comunal, lo confunde, lo paraliza en sus luchas emancipadoras. Esta recomendación de Lenin ha resultado difícil de entender por la vieja y nueva izquierda e imposible de aceptar por el reformismo venezolano.
(o c v)
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