sábado, 26 de septiembre de 2020

LA CUESTIÓN NACIONAL Y EL ANTIIMPERIALISMO. Por Otto Van der Velde Q.

I. Convención Nacional del Frente Unión Popular Revolucionaria Antiimperialista UPRA

Otto Van der Velde Q.


Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT)

Introducción.

                    El tema reviste suma importancia para el esclarecimiento del juego de contradicciones que baten el escenario político venezolano y aún latinoamericano, pero se trata de un viejo y complicado debate de los marxistas cuyos orígenes conocidos podrían situarse a mediados del siglo XIX, bajo el título <de la cuestión nacional> título que resulta más a propósito para el contenido del tema.

-No podemos abarcar tan compleja polémica en tan corto espacio, pero en cambio podemos trazar algunos conceptos generales sobre un asunto en el que nuestra organización viene trabajando desde los años setenta, luego de la derrota militar de la lucha armada revolucionaria en la década anterior.

  En aquel momento, dando los primeros pasos para reestructurar la organización de los comunistas y el frente amplio antiimperialista, el problema nacional se debatía en medio de tres factores producto de la lucha de clases de la época: 1. La razia liquidacionista aplicada con todo rigor por la burguesía punto fijista de FEDECAMARA y sus partidos AD-COPEI .2. Los avances del revisionismo liberal encabezada por el Directorio del MAS y sus iguales en la Dirección Nacional del MIR, corrientes que se levantan oficialmente a partir de 1969. 3. Los remanentes del izquierdismo foquista cuyo militarismo antimarxista, anti partido y sobre todo contrario al leninismo deterioraron la correcta estrategia de la lucha armada de los sesenta prolongando su desviación a la década de la reconstrucción.

-Nuestras posiciones de entonces las manejamos a través de dos instrumentos: el del embrionario PRTV (partido revolucionario de los trabajadores venezolanos, antecedente del PRT actual) y del frente antiimperialista MPDIN (Movimiento Pro-Defensa de los Intereses Nacionales). Nuestra teoría moderna sobre el problemanacional podríamos -a fin de darle fluidez al debate y sus difíciles condiciones de hoy día- esquematizarla al máximo de la siguiente manera: 

A. El asunto nacional venezolano (y con ello el nacionalismo) como producto histórico del desarrollo capitalista y la revolución democrático -burguesa inconclusa y deformada.

B.  La intersección de la lucha de clases en la caracterización nacional. Sus formas concretas en Venezuela en la ideología nacional revolucionarias y en la ideología nacional colaboracionistas dentro del chavismo y otras corrientes políticas, en general hegemonizadas por el nacionalismo de la pequeña burguesía radical.

C. la imposibilidad y los límites del nacionalismo burgués en Venezuela y Latinoamérica del siglo 21 tal como se presenta actualmente dentro del proceso bolivariano. Lo planteado entre antiimperialismo proletario (socialismo -comunismo) y antiimperialismo burgués (“burguesía revolucionaria”), etapismo y neofascismo.

D. Finalmente el programa revolucionario del proletariado: La contradicción moderna opresores oprimidos (liberación nacional, antiimperialismo), su imbricación venezolana en el socialismo revolucionario, la interrelación de a lucha nacional antiimperialista con la lucha de clases, la determinación de ésta sobre el problema nacional. El papel clave y estratégico del proletariado y el partido clasista en los desenlaces de dicha contradicción.

Nota. El resumen de estos puntos se ha hecho en forma rápida, algo desordenada dada la premura del evento. Para su elaboración tomando en cuenta los planteamientos de la Convención Extraordinaria del PRT celebrada en junio del 2005 y otras publicaciones.

   El ciclo actual del PRT, la I Convención Nacional extraordinaria de nuestro partido, preparada desde el 2004 y celebrada en julio de 2006, en la que se consideraron los diversos plenos y asambleas celebradas por el Partido entre el 2005 y la fecha, uno de estos temas, el de mayor importancia para el Partido fue a controversia del problema nacional y el nacionalismo a propósito de la insurgencia chavista y la fulminante derrota imprimida por las masas al poderoso golpe imperialista de 2002-2003 organizado por EEUU, la UE, FEDECAMARAS-VENAMCHAM y los partidos de la derecha local. Este Debate fue sintetizado en sus diversos aspectos en el folleto I Convención Extraordinaria del PRT junio (2007)

   En las palabras de apertura del evento hechas por el camarada Otto Van der Velde, a nombre del Secretariado Nacional y en el Análisis Político de la Convención Extraordinaria se puntualizaron conclusiones que tienen que ver con esta ponencia sobre el problema nacional y el antimperialismo en Venezuela. La evolución posterior de los sucesos venezolanos en el orden nacional, dan validez a los planteamientos hechos en nuestro trabajo.

En el punto D. observábamos entonces “una contradicción nacional, cada vez más aguda, al mismo tiempo que una tensa lucha de clase entre el capital-trabajo (y) entre el proletariado y la burguesía, pero también entre las fuerzas neocolonialistas del capital monopólico y las emergentes fuerzas patrióticas, comunales y campesinas que se abren paso hacia el socialismo y la liberación nacional “ (V. Folleto citado, Palabras de Dirección Nacional a cargo del c. Otto Van der Velde Q. p5)

      Esta situación en desarrollo del problema nacional que fue acelerada por los sucesos del 2002-2003, constituye a nuestro entender el quid del proceso actual, en cuanto al enfrentamientos agudos del imperialismo y los monopolios capitalistas contra las políticas sociales del gobierno y las reivindicaciones obrero-campesinas y comunales, al mismo tiempo que de las vacilaciones, tendencias colaboracionistas y liberales de un sector oficial dentro del Estado-gobierno respecto a asunto de los enfrentamientos de clase y la cuestión nacional, por ejemplo, en las políticas colaboracionistas de la Ley de inversiones extranjeras, de los subsidios y ventajas arancelarias al gran capital, del pírrico salario mínimo de $ 4 dólares mensuales de la clase trabajadora que la dolarización y la virtual desaparición de bolívar reducen día a día, o la criminal liberación de precios, hiperinflación especulativa desatada, pobreza crítica sin control por parte del gobierno, la marcha continua de los planes para las privatizaciones estratégicas petroleras, mineras eléctrica y comunicacionales; la liberación de terroristas de la derecha, sus prebendas institucionales y total impunidad al <gobierno paralelo> de Guaido, simultáneamente a los hostigamientos de la izquierda no reformista, contra líderes obrero-campesinos etc. etc.

    Todo ello al mismo tiempo que encendidos discursos del gobierno contra el imperialismo norteamericano y sus aliados; sus bloqueos y provocaciones; contradicciones inter capitalistas entre los monopolios y sectores de la PYME; deterioro institucional del Estado y sus servicios, politización radical en corrientes del ejército, proletarización y politización generalizada de la sociedad y otras condiciones de gran importancia política, producto de la polarizada lucha de clases en el asunto nacional, conformando un cuadro de alta conflictividad que obligan a una urgente estrategia de poder político del proletariado y sus aliados.

Punto A. Desde nuestra fundación hemos señalado que en la confusión ideológica actual del proceso bolivariano venezolano (pero también latinoamericano) tiene mucho que ver la ausencia de una crítica marxista contundente en cuanto carácter histórico democrático burgués del nacionalismo y sus separaciones estratégicas (o tmbién sus identidades tácticas como el caso venezolano) con el socialismo científico. Cierto oportunismo electoral en las filas de la izquierda local, elaboraron una mezcla indiferenciada de estos dos desarrollos, históricamente contradictorio, creando un verdadero enredo tanto en el carácter del frente como del partido clasista. Esta es precisamente la historia del polo patriótico y del poli clasismo del PSUV

  La diferenciación y autonomía del proletariado con el nacionalismo burgués que es tajante, pero políticamente (o también tácticamente)coincidente, en los casos particulares de la dependencia, el semi colonialismo o el colonialismo, en los que pueden crearse condiciones políticas de hecho para alcanzar una alianza entre el proletariado y sectores democráticos y antimperialistas del nacionalismo burgués (pequeña burguesía nacionalista antiimperialista) en el proceso de liberación nacional materializados en los diversos frentes amplios antiimperialistas.

   Los ensayos frentistas habidos en Venezuela, tanto en el pasado (FLN-FALN) como en el presente, Polo Patriótico, UPRA, Alternativa Popular Revolucionaria y otros, están en el marco unitario de esta condición por más que el poli clasismo del PSUV haya deformado electoralmente a su favor tal condición dialéctica y por más que el resto de la izquierda -incluyendo algunos sectores marxistas- hayan permitido <pragmáticamente>por no decir que oportunistamente electoralsemejante error.

Como se sabe, el problema nacional o cuestión nacional uno de cuyos derivados es el nacionalismo, puede definirse en síntesis muy apretada, como producto del desarrollo histórico y del poder político de la burguesía nacional: el patriotismo, el crecimiento delcapitalismo nacional, la unidad del mercado y de la nación, laindependencia nacional y elantiimperialismo, la unidad idiomática, costumbres y folklore etc.,

   Mientras que el socialismo y el comunismo tiene que ver con el crecimiento histórico y del poder político como clase del proletariado y de todo el pueblo en torno a la unidad nacionalantiimperialista, elanticapitalismo, el internacionalismo proletario, la socialización y el cese de la explotación etc. En resumen, por lo que uno marcha hacia el capitalismo nacional (que puede llegar hasta el monopolio imperialista) otro al socialismo científico que llega al comunismo.

   Dos incompatibilidades históricas, aunque -como es advertido por Lenin- en circunstancias políticas de -dependencia, semi colonialismo y colonialismo-pueden tener puntos comunes cuando el nacionalismo opresor de la burguesía imperialista oprima y explote no sólo al proletariado y la masas sino también a la burguesía local, al campesinado, la pequeña burguesía capitalista y otras capas que aun siendo explotadora de la clase obrera o ajena a ella, son a su vez, oprimida por el gran capital monopolista externo e interno.

Punto B. En Venezuela Se ha formado esa contradicción antiimperialista opresores-oprimidos que abarca asectores revolucionarios del pequeño (y aun mediano capitalismo según la propuesta del comunista cubano Carlos Rafael Rodríguez) con una tendencia antiimperialista dehecho, es decir, cuando ella no es demagógica capaz de crear confusión en el proletariado y fomentar el colaboracionismo en la lucha de clase.

Tal como lo señalaba V. Lenin en sus vigentes “Notas Criticas sobre la cuestión nacional” (octubre-diciembre de 1913) valen perfectamente para hoy día < El principio de la nacionalidad -dice Lenin- es históricamente inevitable en la sociedad burguesa, y, teniendo presente la existencia de esta sociedad, el marxista reconoce plenamente la legitimidad histórica de los movimientos nacionales. Pero, para que este reconocimiento no se transforme en una apología del nacionalismo es preciso que se limite rigurosa y exclusivamente a los elementos progresivos de tales movimientos, con el fin de que no contribuya a enturbiar la conciencia del proletariado con la ideología burguesa>

 La cuestión nacional es pues, en situación de opresión de las masas por los capitales extranjeros y sus aliados de la burguesía interna, un hecho político concreto y real, por tanto, es también tarea política del proletariado. Venezuela la clase obrera y las masas son explotadas por todo e capitalismo, pero como nación es oprimida los monopolios y el imperialismo: explotación-opresión del imperialismo norteamericano y sus socios europeos, asiáticos etc., y la burguesía monopolista interna de FEDECAMARAS-VENAMCHAM contra el pueblo venezolano oprimido, saqueado y explotado, incluyendo al pequeño y mediano capital (PYME) y el campesinado.

 Esto para los marxistas modernos representa unacontradicción múltiple inter capitalista (entre el pequeño y gran capital, siendo parte del “problema nacional” y anticapitalista por ser parte de la lucha de clases entre burguesía y el proletariado, Este es el caso venezolano de hoy, así como del proceso bolivariano chavista.

  Pero esta situación esto no hace en el siglo 21 a la burguesía clase revolucionaria como creen algunos jefes chavistas al estilo del ministro Castro Soteldo o del gobernador del estado Carabobo, La Cava, presentando un plan que apunta no a la liberación nacional sino al desarrollo de un supuesto capitalismo nacional  que no es capaz de alcanzar la independencia nacional por la presencia omnímoda del capital monopolista en Venezuela, especialmente de los monopolios bancarios, pro también gracias a la genuflexión de sectores oficiales de la burocracia y el reformismo, sometido la sombra de los monopolios capitalistas (incluyendo el capitalismo de estado).

   Premisa nacionalista falsa. No puede haber independencia nacional y menos aún socialismo sometidas a las relaciones monopolistas de producción. Esto revela un error fundamental del gobierno bolivariano, con ramificaciones políticas graves tanto para el antiimperialismo, la identidad nacional y el desarrollo independiente como para el desarrollo socialista, las corrientes anticapitalistas y de y la liberación nacional.     En síntesis, dos caminos históricamente paralelos

    Ahora bien, al contrario de la prédica de ciertas posiciones izquierdistas, la burguesía moderna no es homogénea. Dado la hegemonía del imperialismo burgués, esta condición genera diferencias político-económicas que llegan ocasionalmente a la contradicción política entresectores de la PYME, que en más de una ocasión llegan alantiimperialismo burgués.

   Desde el punto de vista nacional y movido por su condición de clase anticapitalista el proletariado es integralmente antiimperialista, pero con fines muy distintos al antiimperialismo nacional revolucionarios de la pequeña burguesía. Por motivos de espacio hablaremos en otra oportunidad con más detalles de este fenómeno, aunque remarcando que tal dialéctica es básica tanto para la concepción del frente antiimperialista, como para el programa, la lucha capital-trabajo, para la estrategia de poder político de las clases explotadas y oprimidas contra el viejo Estado capitalista, para su demolición y la fundación del nuevo estado proletario. En general muy poco ha entendido nuestra izquierda de este complejo problema, podemos demostrarlo concretamente.  

Los nacionalistas bolivarianos (y algunos de sus primeros asesores extranjeros, entre otros H. Dietrich) no perdieron tiempo en popularizar dichas contradicciones dentro de una verdadera ensalada ideológica –que algunas veces funcionó como táctica confusionista de masas de los nacionalistas- difundida empíricamente en la línea revisionista del socialismo del siglo 21 pero también en el desarrollo del PSUV como partido poli -clasista de la revolución en sí misma.

Desde el primer momento señalamos esta condición histórica del nacionalismo, advirtiéndola en cuanto al chavismo, así la reseñamos en nuestra Convención Extraordinaria y en los documentos publicados desde entonces, aunque la dureza no fue no tanto contra el error chavista sobre el problema nacional -que podría tener alguna explicación racional desde el punto de vista de su naturaleza nacionalista sino de sus tesis empíricas sobre el <socialismo>, que es una teoría desconocida de conjunto por la pequeña burguesía nacional bolivariana, pero sobre todo dirigida contra la postura de algunos camaradas que desde el inicio del proceso bolivariano reprodujeron los inventos empíricos y la praxis  chavista sobre el socialismo como eldesideratum del socialismo a la venezolana, no ortodoxo, inédito y único en el planeta, lo cual constituía una verdadero trato pirata sobre el problema nacional en el marco de una lucha por el socialismo..

  Tal enroque de nacionalismo bolivariano por socialismo revolucionario, su politización inmediata y ventajista por parte del chavismo, selló hermética y sectariamente el debate teórico-práctico sobre el tema nacional (programa, frente, lucha de clase, alianzas etc.), afectando la correcta educación socialista de las nuevas generaciones revolucionarias a lo largo y ancho de todo el proceso bolivariano* *(Sobre los límites ideológicos del nacionalismo bolivariano véase la. p9 y otras del mencionado folleto de la Convención Extraordinaria 2006-2007).

   Obviamente ese error ha tenido repercusiones políticas muy concretas y graves en cuanto al desarrollo del partido de clase (P. proletario), en el programa revolucionario, también en el manejo de las coyunturas, profundización política del proceso y en la preocupante desviación actual a nivel del Estado-gobierno y partido de gobierno un liberalismo en contraposición al grueso de cuadro tanto del partido como del propio gobierno y el Estado.

   Este juego de contradicciones no estudiadas, menospreciadas por el triunfalismo y peor tratadas en el accionar político, la haraganería teórica y los viejos prejuicios de algunos marxistas respecto al problema nacional -incluso cierto oportunismo electoral recubierto de pragmatismo- o el desconocimiento marxista de lacuestión nacional, facilitó el enroque y la falsificación del problema nacional en el marco del antiimperialismo de masas, un hecho irónico en contraste con el poderoso momento nacional liberado por el movimiento chavista.

Su incorrecto tratamiento en el seno de las grandes masas, en especial dentro del movimiento obrero avanzado, el no esclarecimiento del problemanacional y la lucha de clases, reemplazado en su complejidad por el triunfalismo sectario y la fanfarronería ideológica, desorienta y debilita en el seno del pueblo la toma de conciencia y las propias tareas antiimperialistas concretas, facilitando el populismo, las posiciones liberales y otros desvíos dentro del gobierno chavista,

    Esto explica que en contraste irónico con el arsenal de discursos patrióticos, apareció “de la nada” la desastrosa dolarización de la economía, aflorando una enorme inconsecuencia entre el discurso nacionalista y la praxis oficial del nacionalismo, Obviamente esas incoherencias han servido para aumentar la confusión imperialista de las masas, sus diversos planes cesionistas, de bloqueo, crisis económica, privatizadores, robo de activos nacionales etc. y para revivir las posiciones reformistas internas

   En definitiva, el cuadro del problema nacional se presenta para el proletariado y sus frentes amplios de lucha, de un lado tendencias antiimperialistas pequeño burgueses autolimitados por su condición de sector de clase que utópicamente aspira a un capitalismo nacional tardío, lo cual, hemos repetido mil veces, no es posible a la altura de la contradicción proletariado- burguesía imperialista, pero no por ello dejando de generar roces y diferencias con los monopolios de FEDECAMARAS-VENAMCHAM y el propio imperialismo. Sus sectores más radicales pueden llegar a formar parte estable o inestablemente del frente nacional.

    Por el otro, la contradicción nacional da formas a amplias capas orgánicas del nacional antimperialismo popular, una tendencia de masas impactada (más recientemente) por la incoherencia del fogoso discurso patriótico del gobierno y las inconsecuencias prácticas del mismo, masa que en general odia a la derecha, empieza a desconfiar del gobierno, en la misma proporción que mira con mayor atención la propuestas del antiimperialismo proletario y su correlación con el socialismo revolucionario., de cuyo programa se siente más cerca.

Punto E.  Por lo antes analizado, este escenario revela:

 (1) <la imposibilidad y los límitesexpansivos del nacionalismo burgués en Venezuela y Latinoamérica del siglo 21” (2) la real posibilidad de un enfrentamiento a gran escala entre opresores y oprimidos, dirigido no por los nacionalistas (como ocurre hasta ahora) sino por el proletariado (3) y que, por ello, lo planteado ahora en el problema nacional venezolano es aclarar las tesis y el programa nacional a la luz del proletariado, no de nacionalismo pequeño burgués radicalizado;concientizar en la verdadera naturaleza del programa socialista a la vanguardia revolucionaria y de allí ir a las masas; estableciendo claramente las diferencias entre antiimperialismo proletario (hacia el socialismo -comunismo),y el antiimperialismo burgués (“burguesía revolucionaria”, hacia el <capitalismo nacional etapista e inevitablemente a la dependencia) (4) Alertar sobre el enorme y real peligro de la guerra mundial por la enorme tensión inter imperialista internacional, la crisis estructural que bate al capitalismo como sistema, sus terribles consecuencias para las masas en cuanto a la pobreza crítica, el desempleo, inasistencia social etc., y finalmente la reorganización de los partidos neofascistas intervencionistas, todo lo cual pone a los marxistas leninistas, al proletariado, a los antiimperialistas, frente a la impostergables tareas de la unidad revolucionaria, la unificación urgente de los diversos frentes de lucha electorales o no en un solo bloque unitario, amplio, no sectario  no reformista. He aquí una tarea básica ahora.

   En otras palabras, que en el problema nacional venezolano (y quizás latinoamericano), la contradicción como nación oprimida, programa liberador etc., esta indiscutiblementeinterferida y determinada por la lucha de clases o sea por la contradicción histórica burguesía-proletariadosiendo este antagonismo de la < La contradicción moderna opresores oprimidos (liberación nacional, antiimperialismo) y socialismo la interrelación correcta de lo nacional con la lucha de clases, una condición que solamente puede ser desenlazada favorablemente por el proletariado como clase y sus aliados revolucionarios, desempeñando una política amplia, anti sectaria, de gran amplitud en el manejo de la táctica y el programa liberador, pero sin estrecheces liberales y colaboracionistas.

   Es la gran tarea a cumplir por el proletariado y el partido clasista en la organización y conducción del del frente amplio antiimperialista, su actuación consecuente en la poderosa, compleja y múltiple contradicción actual, sobre todo en cuanto a su autonomía respecto al nacionalismo; la capacidad proletaria de distanciarse, acercarse o romper justo en el momento preciso, ni antes ni después con los planes y provocaciones ambivalentes del reformismo (dentro o fuera del Estado y el gobierno bolivariano); de separarse tajantemente de la derecha externa e interna, a tiempo que de dar a conocer profundamente dentro de las masas el programa proletario, su organización y las posibilidades muy ciertas que

existe de demoler al ineficiente estado capitalista en función de construir un nuevo Estado obrero-campesino y comunal, verdaderamente independiente y socialista. Actuar científicamente no empíricamente frente al problema nacional y la lucha de clases en Venezuela.


EL CARÁCTER ESTRATEGICO DE LA ALTERNATIVA POPULAR REVOLUCIONARIA (APR)

PARTIDO REVOLUCIONARIO DE LOS TRABAJADORES

APR LA  ALTERNATIVA  POPULAR  REVOLUCIONARIA

En varias reuniones en el Estado Bolívar, hemos conversado y discutido sobre la importancia y el carácter ESTRATEGICO de la ALTERNATIVA POPULAR REVOLUCIONARIA  (APR)  y el avance que significa para el Movimiento Revolucionario Venezolano (MRV), su consolidación y el llegar a comprender en la práctica que la pequeña burguesía y la dirección nacional burguesa Bolivariana. No es Socialista y mucho menos Comunista, por tal motivo los intereses del proletariado y todas las clases explotadas no lo representa una dirección Nacional Burguesa y sus alianzas de clases tienen un límite, en el marco de las luchas entre las clases. Es allí en ese  marco de la lucha de clases en Venezuela, donde surge  la Alianza Popular Revolucionaria. Cuyo  principal objetivo es la consolidación de una dirección política proletaria  socialista e impulsar las reivindicaciones económicas y políticas dentro del marco Nacional Antiimperialista y culminar el camino a la consolidación del Socialismo. 

En base a este planteamiento y al aprovechamiento de una coyuntura electoral, muchos militantes se preguntaba, el ¿cómo? diferenciarse del gobierno de Nicolás  Maduro,  quienes manejan la consignas socialista y antiimperialista de palabra, mas no de hechos.

Dentro del marco de la discusión la propuesta en cuanto a cómo nos diferenciamos los militantes del APR (y los partidos que la conforman), de los partidos y sectores Bolivarianos Burgueses del gobierno de Nicolás Maduro, se estableció  que la principal diferencia es el programa de gobierno hacia el pueblo Venezolano y por ende el programa y consignas de nuestros candidatos a la Asamblea   Nacional debería representar el programa de lo que aspiramos los Socialista y lo que sería un Gobierno Socialista de la APR,  tanto a nivel local como Nacional.

Los trabajadores mineros propusieron algunos puntos de discusión el primero fue oponerse a la intervención Gringa, de la OTAN  y  sus lacayos (la dirigencia de la burguesía Colombiana, Brasileña y demás países). Llamar a los pueblos de Brasil, Colombia y América Latina a convertir una guerra que favorece a los intereses del Imperialismo, en una Guerra Revolucionaria por el Socialismo y la Humanidad. 

Segundo oponernos a la política de privatizaciones del gobierno de Nicolás Maduro y el pro imperialista y ultraderechista de Guiado.

En el país se ha concretado  una política de privatización ,por parte del gobierno Nacional en las minas, la principales industria mineras y yacimientos fueron privados de hecho pasaron de ser 100% administrado por el gobierno a ser administrado por sectores privados caso Minerven( Mibiturven),la mina Simón Bolívar,  Sosa Méndez, Choco, Isidora, hasta el proyecto de las lagunas de colas de Caratal y Mocupia   fueron a parar a manos privados, bajo el argumento de que el estado no sirve como administrador. 

La misma suerte corrió el yacimiento la Cristina, Brisas entregados a la empresa privada llamado Gold Reserve. Pero esto no solamente llega hasta aquí, la privatización de la industria petrolera y el comercio de la gasolina (retrocediendo en el legado de Chávez) y como  consecuencia incremento  los costó  de producción del sector de la pequeña minería,  encarecimiento del costo de la vida a los pequeños mineros del trabajador en general  dejándolo sin posibilidad de crecer y afectando la producción y aumentando el desempleo.

 Esto va acompañado con el aumento de los impuesto sea de manera formar o informales, gubernamental o no gubernamental, aumentado la carga al pequeño productor y ubicándolo en un nivel de  super explotado y en una situación casi feudal como siervo de gleba. 
Del comercio ni se diga, los chino, árabes y todo tipo de comerciante hace de la población minera lo que le da en gana, por ejemplo No aceptan tarjeta de débito, si llegaran a aceptarla pechan con un impuesto al consumidor (No hay gobierno en Venezuela), solo aceptan bolívares efectivo, dólares y oro.

 Cuanto oro recogido en el comercio de bienes e insumos, por parte de los chinos, árabes o comerciante se reportan a los ministerios. En materia laboral exigir cumplimiento con la Ley  Orgánica del Trabajo, aumento salarial por encima de la canasta básica, control excautivo de los precios de los productos de primera necesidad. Activación de la contrataciones colectivas paralizadas y negadas por Maduro y Jagua. Pasar lo medios de producción a manos y dirección de los trabajadores .Reforma agraria ya.
Revisar y restablecer un sistema de salud que garantice  la prevención y el servicio de atención médica gratuita, nacionalizar todas clínicas privadas  y farmacias colocándola y ponerla al servicio del pueblo.

Nos oponemos a la represión que ejercen  organismo del estado, violentando los derechos del pueblo en la búsqueda de en  alimentación, medicina y respuesta a sus necesidades fundamentales para subsistir en esta crisis que azota al país. 

  Estos son los primeros  puntos del programa que deben enarbolar nuestros candidatos a diputados, la APR y los partidos que la integran en el estado Bolívar, cuya población en gran medida depende su sustento de la actividad minera, porque ya un sueldo de un trabajador de una Industria Básica, no es ni suficiente para mantener a su familia.

No a la privatización de la industria minera! 

No a la privatización de la industria básica pesada! 

No a la privatización de laIn dustria  Petrolera! 

No a la privatización de la comercialización de la gasolina! 

Rescatemos los yacimientos mineros del pueblo Venezolano! 

Control de los precios del producto de primera necesidad! 

Control y seguimiento para los comerciantes inegrupolosos y especuladores! 

Control de la circulación de monedas extranjeras! 

Prohibir la venta de alimentos y productos de primera necesidad por oro! 

VOTA POR LA ALIANZA POPULAR REVOLUCIONARIA! 

VOTA POR EL PCV! 

PARTIDO REVOLUCIONARIO DE LOS TRABAJADORES                 

 

jueves, 10 de septiembre de 2020

QUIÉN FUE THOMAS ROBERT MALTHUS Y QUÉ RELACIÓN TIENE HOY CON EL COVID-19

SABES QUIÉN FUE THOMAS ROBERT MALTHUS Y QUÉ RELACIÓN TIENE HOY CON EL CORONA VIRUS, COVID-19, AÑO 2020.

Por: Jesús Williams Niño Sánchez 

Thomas Robert Malthus, fue un clérico de origen inglés, quien escribió un libro, denominado “ENSAYO SOBRE EL PRINCIPIO DE LA POBLACIÓN”, en el siglo XVIII, durante el período feudal es el marco donde desarrolla su tesis sobre la posible extinción de la raza humana y hace un alerta sobre este supuesto,  establece que debido a la sobrepoblación  llevaría posiblemente a la extinción de la raza humana y esta sobre población llevaría a  su vez a una crisis alimentaria debido al recurso de la tierra no podría alimentar a la población. 


Las ideas principales que  desarrolla Malthus, las basa en los cálculos realizados al crecimiento de la población,  esta no tenía  ningún  tipo de control, la cual responde a una progresión geométrica duplicándose cada 25 años (1, 2, 4, 8, 16…).  Al mismo tiempo la producción de alimentos, en tanto, solo crecería en una progresión aritmética  (1, 2, 3, 4, 5…), debido a la existencia de rendimientos decrecientes y a la limitada capacidad productiva de los suelos.

La conclusión a la cual llega en función de los cálculos efectuados, llevaría al colapso de recursos, y por ende al hambre y la escasez. De acuerdo con las cifras de Malthus, dentro de dos siglos la proporción entre población y alimentos sería de 256 a 9, relación que iría empeorando con el tiempo.

Esta tesis genero un gran impacto en la sociedad y sobre todo en la clase dominante, quienes se vieron amenazados su estatus, político y social y sobre todo, apuntalaron su atención en las masas depauperadas, harapientas, hambrientas y enfermas que habitaban por miles en las ciudades europeas, cuya salubridad era casi inexistente, sin entender que eran ellas mismas tenían  responsabilidad de esa pobreza debido al sistema económico dominante profundamente desigual y clasista, las tesis del clérico, encontraron un terreno fértil para su propagación y desarrollo.


Bajo estas circunstancias se desarrolla y expande una corriente económica y sociológica denominada el maltusianismo, debido a las conclusiones obtenidas y para evitar la catástrofe que se les avecinaba, este realiza una serie de recomendaciones: 

Evitar que los individuos contraigan matrimonio antes de que cuenten con los medios suficientes para poder mantener a su posible descendencia.

Eliminar las ayudas del Estado, ya que promoverían la pereza y pobreza. 

Hacer predicciones del crecimiento de la población. 

Promover el celibato entre otras.

Todas las propuestas conducen al control de la natalidad con el fin de detener, el crecimiento poblacional, ya que los recursos de la tierra no serán suficientes para poder alimentar a la creciente población y que además, la única forma de lograr la supervivencia humana era controlarla. 

Las principales críticas al maltusianismo,  fueron  su frialdad y desconsideración con los menos favorecidos, las masas empobrecidas por el sistema de explotación vigente,  imaginen que el propulsor de esas tesis  era un clérico, un sacerdote, el cual debía tener más aprecio para con los desposeídos o los más pobres de la sociedad.  Otro aspecto lo constituye   el  carácter excesivamente  pesimista, no considero  o tomo en cuenta las capacidades creativas del hombre en la sociedad. 

El hombre a través de desarrollo, de la ciencia, de la investigación, ha podido  implementar nuevas técnicas que han permitido el  aumento de la producción de alimentos a niveles no considerados por las generaciones anteriores. Hoy en día uno de los problemas que enfrenta la humanidad es la pérdida y desperdicio de alimentos en los países desarrollados mientras que en otros países mueren una cantidad de personas por la falta de ellos.

Sin embargo,  a pesar de las críticas  que se le realizaron al maltusianismo, todavía hoy, subyacen las ideas prejuiciosas de esté, en el pensamiento central  de la clase dominante, en los políticos que justifican el control de la natalidad en los sectores populares, los justifican las guerras con el fin de controlar o mejor dicho diezmar a la población. El virus denominado coronavirus COVID-19,  su pandemia logro que afloraran las ideas que sustentan los imperialistas, supremacistas, y racistas de la clase dominante, maltusianismo de primer orden.

Analicemos las bases del neoliberalismo, la aplicación del control financiero, desmontaje del estado, medidas desregulatorias del mercado, liberación de precios, liberación de las tasas de interés, pero quien maneja los hilos del mercado, privatización de las empresas del estado, cuando suben los precios de los productos básicos como son los  alimento y no pueden ser adquiridos por los más pobres, bajar los salarios,  precarización del empleo y lo que no pueden trabajar para ganar su sustento, cuando se eliminan los servicios de salud y de educación, eliminación de las políticas de protección social; eliminación de los subsidios;   quienes son los que viven en la calle, en los refugios y estacionamientos, no es obvio el control de la población, quienes son lo que morirán para que se mantenga el estatus vigente, quienes son los más vulnerables.

 Como ejemplo  en tiempos de coronavirus tenemos un dirigente político norteamericano quien expreso con cierto alivio que los que  mueren en EEUU, son  los negros y los latinos  y no los blancos (rico y protestantes), igualmente otro político planteo “que los mayores debían sacrificarse para salvar a los jóvenes” pero porque no fue el mismo, él, como primer voluntario, ya que el mismo no  es  tán joven y quien propone debe dar el ejemplo, o no. Dos médicos franceses querían que se aplicaran las pruebas en áfrica, de las vacunas del coronavirus, para ellos los negros africanos son cobayas o conejitos de india,  no es solo un problema racial lo que está allí, o cuando en Ecuador, Chile, Colombia, Brasil, Perú y Bolivia no actúan para “proteger” a la población de la pandemia, “es para salvarles la vida” o es simplemente para no decir o asumir que se mueran los indios, los pobres, los marginales,  los explotados, la clase trabajadora, la población  que están de más en la sociedad.  

Hoy abro el debate, el maltusianismo persiste en las clases dominantes y es más cruel, es más frio e inhumano, además, esperan que aceptemos el sacrificio de nuestra vida (morir) para que ellos mantengan sus ganancias económicas y su estatus, son una descarados de marca mayor, váyanse al carajo!!!


miércoles, 9 de septiembre de 2020

Orientaciones para la lucha a los trabajadores venezolanos

PARTIDO REVOLUCIONARIO DEL TRABAJO (PRT) 

Orientaciones para la lucha a los trabajadores venezolanos. 



Por: Jesús Niño 

El sistema capitalista mundial, en los actuales momentos atraviesa una crisis estructural que tiene sus antecedentes en la  crisis de las hipotecas subprime (bonos basura),  fue una crisis financiera, generada por desconfianza crediticia, la cual se desarrolló como un rumor creciente y luego se extendió primeramente por los mercados financieros de  Estados Unidos y fue la alarma que puso en el punto de mira a las hipotecas basura de Europa desde el verano del 2007, evidenciándose al verano siguiente con la crisis financiera de 2008. 

La crisis hipotecaria, se expresó de las siguientes formas: hay numerosas quiebras financieras, nacionalizaciones bancarias, constantes intervenciones de los Bancos centrales de las principales economías desarrolladas, profundos descensos en las cotizaciones bursátiles y un deterioro de la economía global real, que ha supuesto la entrada en recesión de algunas de las economías más industrializadas, lo cual se mantiene hasta hoy. 

La crisis capitalista, obliga a analizar en profundidad el papel estratégico que le corresponde jugar a la clase obrera. Por supuesto que en el contexto mundial ya se están sintiendo las manifestaciones, producto de las consecuencias de esta crisis: “El masivo desempleo”. Estas consecuencias no solo se sienten en este continente, sino que se sienten aún más en los países desarrollados. 

Si bien es cierto que en nuestro país, se han tomado algunas medidas paliativas ante la crisis capitalista lo que disminuyen su impacto, este, de alguna manera u otra afecta la economía nacional y la suerte de la clase trabajadora venezolana, victimizada por el capitalismo que “terceriza” los derechos laborales, y reprime el derecho constitucional de los trabajadores a la protesta (criminalización de la protesta), hay patrones privados como seudo-patrones* del sector público, criterio que es necesario aclarar muy bien estos: No son dueños del medio de producción, son administradores temporales de un bien de carácter Público, de los cuales nosotros como venezolanos somos también poseedores del bien” y precisamente estos, son los que no aceptan, no acatan el fallo de los tribunales como es la incorporación de los trabajadores, situación que se da con la mirada complaciente del Ministerio del Trabajo. 

Hoy la clase obrera, históricamente explotada tiene una oportunidad que difícilmente se repita en condiciones similares, sería sumamente estúpido dejarla pasar, por indiferencia, dejadez o falta de claridad en nuestro objetivo histórico. Si el capitalismo expoliador de riquezas y explotador de seres humanos, esta es su peor crisis, es deber de la clase obrera implementar acciones estratégicas en procura de hacer desaparecer, de una vez por todas ese régimen injusto y depredador. 

Es por ello que, como clase históricamente oprimida, debemos aprovechar sus debilidades, transformarnos organizadamente en la fuerza dominante, imponiendo nuestra mayoría sobre las minorías burguesas y pequeño burguesa que hasta hoy han sido privilegiada, es decir, imponer nuestros dominio sobre los patronos capitalistas. 

No hay otra alternativa; la lucha de clases no es otra cosa que la imposición del dominio de las mayorías explotadas sobre las minorías explotadoras. Para ello es imprescindible la conversión de los medios de producción capitalista en medios de producción social, sin lo cual solo estaríamos contribuyendo a esperar pasivamente que se recomponga de alguna forma este modelo explotador y expoliador de las riquezas y del trabajo humano. 

En relación al movimiento sindical en Venezuela, este no se encuentra en su mejor momento debido a la atomización, fraccionamiento, divisiones partidistas como tendencias anarquistas, que privan en su seno que en nada contribuyen a la unidad orgánica de los trabajadores, además, de estar invadidas por oportunistas, reformistas de concepción economicista, los cuales frenan la implementación de una política proletaria, no les interesa para nada, han degradado al sindicalismo convirtiéndolo en sindicalerismo, utilizándolo como herramienta para obtener prebendas y recoger las migajas que dejan caer los grupos económicos (nacionales y trasnacionales) que continúan medrando y dominando la economía nacional. 

Es oportuno señalar que en los actuales momentos con la situación que atraviesa el país con la crisis económica, cuyos orígenes son la expresión de la crisis sistémica del capitalismo mundial y su lucha a nivel nacional por medio del boicot empresarial y comercial con una hiperinflación, digitada desde el imperialismo norteamericano y apoyado por sus lacayos europeos y sus epígonos nacionales, estos han vista su “camino libre” por el vacío político ideológico de los sindicatos y de la falta de conciencia de clase, y la miopía evidente de sus dirigentes ya que se habían habituado a la lucha economicista o como se le define vulgarmente la “lucha por la arepa”, y desde luego se quedaron totalmente rezagado antes las grandes masas de trabajadores quienes se ven sin unos verdaderos líderes de la clase que orienten, dirijan enseñen y además, den respuesta a la nueva etapa en que se encuentra la lucha de clase que vive nuestro país hoy. 

La actual situación mundial, de la cual Venezuela no escapa, nos obliga como clase obrera a fijar posiciones claras y precisas en cuanto a la imperiosa necesidad de organizarnos política, ideológica y programáticamente, además, obliga también a las organizaciones sindicales, asumir de manera objetiva, nuestro rol histórico: La toma del poder, la transformación de la economía y el desarrollo del socialismo en función de salvaguardar el planeta y con ello la especie humana amenazada por el capitalismo.” 

Para lo cual se hace imprescindible la conversión de los medios de producción capitalistas (monopolistas) en medios de producción social, sin lo cual estaríamos contribuyendo a esperar pasivamente que se recomponga de alguna forma este viejo modelo explotador, expoliador de las riquezas y del trabajo humano. De allí la importancia de la aplicación del artículo 113 de CRBV, donde se expresa la necesidad de disolver los monopolios por ser estos contrarios a los preceptos constitucionales y del artículo 114, donde se deben penalizar los ilícitos económicos y que hasta el momento nada o casi nada se ha realizado en este sentido por parte del gobierno. 

Otro aspecto que no debemos dejar de lado, es la situación en el seno del movimiento revolucionario, de los oportunistas que haciéndose llamar “socialistas” asumen el triste papel de falsificar el socialismo científico a fin de continuar con la política de colaboración de clases. Estos oportunistas no diferencian las políticas nacionalistas de las verdaderas concepciones y políticas Socialistas. Además, siempre entorpecen cualquier iniciativa que los socialistas se propongan desarrollar entre las masas y en especialmente dentro del movimiento obrero. 

Estas facciones se han dedicado a crear confusión dentro del movimiento obrero, a la par mantienen una política de colaboración de clase con los opresores. Es por ello que surge la imperiosa necesidad de abrir las vías para la educación política - ideológica dentro de la clase trabajadora, en especial en los sectores menos formados, y en paralelo, fortalecer ideológicamente a los sectores que, con voluntarismo y espontaneidad desarrollan trabajos dentro del movimiento obrero, demostrando en los hechos el rechazo y combate al burocratismo que pervive dentro del movimiento de los trabajadores. 

Otras tareas que se debe acometer principalmente por la clase obrera venezolana son las siguientes: Avanzar con autonomía sin cederle terreno a la derecha capitalista, fuera y dentro del proceso revolucionario como estrategia primordial Expulsar sin vacilación a los sindicalistas corruptos de sus filas Politizar las disputas proletarias y organizar un programa unificado de lucha Construir un partido de clase que surja desde las organizaciones de la clase obrera que abone el camino para asumir el poder en nuestra nueva sociedad socialista. 

Hoy la tarea fundamental es diferenciar y desenmascarar las posiciones de los actores políticos; diferenciar las intenciones de los oportunistas, socialdemócratas, social revolucionarios, arribistas, entristas, “sindicaleros” economicistas, y otras expresiones de igual calaña, y deslindarla de las posiciones y políticas ideológicas realmente revolucionarias, planteamientos basados en los descubrimientos desarrollados por Carlos Marx y la y victoria del proletariado Ruso por el planteamientos teóricos - prácticos como de dirección de liderazgo de Vladimir Ilich Ulianov, Lenin, como de la derrota del imperialismo materializado por Iósif Vissariónovich Dzhugashvilli, Stalin y la lucha de liberación desarrollada por Mao Zedong, en China. Cuyas luchas dejan abiertas la acciones emprendías para la transformación revolucionarias de sus sociedades. Por la socialización de los monopolios y especialmente del sistema financiero!!! ¡¡¡Viva la clase Trabajadora!!! ¡¡¡Viva el proletariado!!! ¡¡¡Únete y lucha venceremos!!! 


PERPECTIVAS PARA EL AÑO 2020 DEL FRENTE POPULAR ANTIIMPERIALISTA Y ANTIFASCISTA

PERPECTIVAS  PARA EL AÑO 2020 DEL FRENTE POPULAR  ANTIIMPERIALISTA Y ANTIFASCISTA                                       F P A A*.


Por:  Jesus Niño.

Estamos a escasos días que termine el año  2019, sin embargo la crisis estructural del capitalismo mundial no ha sido superada, más bien se profundiza, lo cual arrastra a grandes contingentes de seres humanos a condiciones de mayor depauperación, crisis cuyas características implican hambre, desempleo, anarquía y se abre la posibilidad de una guerra mundial capaz de llevar a la especie humana a su extinción.
En Venezuela los coletazos de la crisis tienen una proyección cada vez mayor, agravándose por las medidas restrictivas de carácter financiero, la confiscación de cuentas del estado, en bancos internacionales, la imposibilidad de adquirir materias primas, partes y repuestos para la industria, alimentos y medicinas como de otros rubros que afectan el desarrollo económico y social del país.
Las medidas restrictivas están auspiciadas y direccionadas por el imperialismo norteamericano y sus lacayos europeos con sus epígonos nacionales quienes mantienen activo, el boicot empresarial y comercial dentro del país y cuyas consecuencias se evidencia en la hiperinflación, encarecimiento, y escases de productos de primera necesidad, disminución del poder adquisitivo de la clase trabajadora, la cual sufre las consecuencias de la crisis como de las insuficientes políticas económicas y de las inconsecuencias de un gobierno que se dice obrerista, antiimperialista, antifascista, revolucionario y socialista.
El año 2020, se avizora bastante dinámico pero sobre todo, de lucha para defendernos y avanzar por sobre las  condiciones adversas que padecemos, es necesario que el proletariado venezolano pase a la ofensiva contra el imperialismo y el fascismo y a la vez desenmascarar las falsas posturas dentro de algunas corrientes políticas que dominan algunos sectores del gobierno (PSUV), las cuales aplican políticas de corte neoliberal, haciéndolas pasar por “socialistas”,  desdibujan  y falsean, además, de conculcar derechos conquistados por el pueblo en sus luchas.
 El 2020, va ser un año de  ascenso político de los sectores revolucionarios, año donde se intensificara la  lucha de clase, la cual está ya,  en una nueva fase, muy  distinta a las de periodos anteriores, lo que requiere dimensionar el carácter protagónico y participativo de nuestra organización en el ámbito nacional e internacional.
Es oportuno señalar que año 2020, se abren dos aspectos dominantes en la coyuntura nacional en lo externo, la amenaza internacional sobre nuestro país, por el imperialismo norteamericano y sus socios europeos y sus expresión latina con el grupo de Lima, sin perder de vista el caso Colombia como punto de lanza, en el ataque sistemático contra el país;  en lo interno el escenario estará dominado por la oposición interna en su juego macabro por la toma del poder, usando la fachada de la Asamblea Nacional y por el otro el gobierno (PSUV), planteando la salida electoral, además, visibilizando y propagandeando a un sector  opositor tradicional cuya génesis viene de la división de los adecos-copeyanos-masistas entre otros. Por el otro lado la profundización de la crisis económica y social, cuya carga recae cada vez más sobre los hombros de la clase  trabajadora y el pueblo en general.
Para nadie es un secreto, que las condiciones  salariales de la clase trabajadora venezolana cayeron en picada, al igual que las condiciones físicas y contractuales, condiciones objetivas y subjetivas que han motivado que una masa de trabajadores hallan optados por migrar, y otro sector piense en la migración como posibilidad y otro cayendo en la desmovilización y la desmoralización,  fenómenos que han sido manejado incorrectamente por el gobierno nacional (PSUV) y que el oposiciónismo le saca provecho.
El Frente Popular Antimperialista y Antifascista (FPAA), debe realizar una evaluación permanente  de las  actividades realizadas, determinar su impacto y redimensionar su accionar ante las masas a ser tocadas, por tanto debe contar con un plan mínimo y un cronograma y metas para ser alcanzadas en un tiempo determinado, las posibilidades en el seno del pueblo son oportunas, las coyunturas son favorables para  el desarrollo de la políticas del frente, sería un error a nuestro juicio no profundizar la unidad de las organizaciones a través de un programa mínimo.
En tal sentido para amarrar y aglutinar las fuerzas del frente proponemos las siguientes acciones para su desarrollo:
1. Desarrollar  intensa campaña ideológica donde expliquemos bien, cuales son nuestros intereses de clase; no al capitalismo y al reformismo, si al socialismo; que son los monopolios y sus relación con la economía y el imperialismo artículos 113 y el 114 de la CRBV.
2. Fijar posición publica de nuestra posición política cuyo principio es: oponernos a la privatización  de las empresas estratégicas mineras (petroleras, gasíferas auríferas otras) del estado  venezolano.
3. Denunciar el boicot comercial y empresarial llevado por las estructuras de FEDECAMARAS Y VENANCHAN,  luchar por la congelación de precios, salarios dignos, las prestaciones sociales, devolución de la tierra a los campesinos, base fundamental para impulsar una urgente industrialización y revolución agraria a gran escala social.
4. Defenderemos las medidas sociales logradas por la lucha popular revolucionaria; con igual fuerza nos opondremos al bloqueo imperialista, a la dolarización de la economía venezolana y el abandono de control de cambio, medidas que no traerán más que ruina general de las grandes masas, junto a una mayor dependencia económica sin salida para el desarrollo nacional.
5. Fortalecer el trabajo  conjunto en el ámbito electoral y con los trabajadores
6. Lucharemos en todos los terrenos por un Estado obrero-campesino y comunal como la única solución popular segura frente a esta profunda crisis capitalista del siglo 21. 


“Luchar Por un Gobierno Obrero, Campesino y Comunal”
“Por la Unidad del Movimiento Popular Revolucionario”
Venezuela-Caracas Diciembre 2019

*FPAA: lo componen partidos políticos y movimientos sociales tales como: Partido Comunista de Venezuela (PCV); Patria Para Todos (PPT); Partido Revolucionario del Trabajo (PRT); Movimiento Gayones (MG); Lucha de Clases (LC); Izquierda Unida (IU)